A ninguno se nos escapa que ante la actual crisis económica, social y sanitaria que estamos atravesando una gran parte de las pequeñas empresas haya intentado reinventarse o adaptarse a la nueva situación con distintas iniciativas, campañas, modernización o digitalización de sus productos, entre otros. Y es que precisamente de ello depende en gran medida su continuidad, de la diversificación de sus negocios y, como bien dice el refranero español, de “no poner todos los huevos en la misma cesta”.
Desde los comienzos de nuestra empresa hemos creído firmemente en la importancia de la diversificación de nuestro negocio para continuar creciendo con el tiempo. Esto no quiere decir que no sea importante la especialización, todo lo contrario, sí creemos que es fundamental centrarnos en uno o varios nichos de mercado, por ejemplo, en traducción jurada, traducción médica o localización de videojuegos, entre otros.
Sin embargo, si reducimos en exceso nuestro embudo (véase nuestro número de clientes o nuestras áreas de trabajo), corremos el riesgo de que, si algo falla, el volumen de trabajo e ingresos se vea notablemente reducido. Por ejemplo, un traductor que únicamente trabaje para dos empresas de traducción puede experimentar dificultades desde el momento que una de ellas deje de enviarle encargos o reduzca el número de trabajos mensuales por cualquier motivo. En cambio, si un traductor no solo trabaja para varias empresas de traducción, sino que además tiene clientes privados no notará de manera tan evidente este descenso en ingresos o trabajo si uno de ellos falla o disminuye su volumen de encargos.
Por este motivo, en nuestro caso nos hemos decantado por especializarnos en traducción jurada, interpretación jurada y de conferencias y docencia, combinando tanto clases presenciales como en línea de traducción e interpretación. Inicialmente nos centrábamos en solo una de estas áreas, pero con el tiempo hemos englobado principalmente las tres para así ir diversificando nuestro negocio. De este modo no solo hemos logrado ir poniendo nuestros huevos y esfuerzo en distintas cestas para capear mejor las dificultades o periodos de menor trabajo, sino que también hemos conseguido que nuestra labor sea más amena, variada e interesante.
Y tú, ¿qué opinas de la diversificación de un negocio?